Los muñecos Playmobil superan en cantidad a la población china, y rodean dos veces nuestro planeta con los brazos extendidos. Todo comenzó con una crisis hace 35 años.
Estas figuritas de plástico, que siempre nos sonríen, constituirían la mayor población mundial -más de 2.200 millones de muñequitos- si fuesen de verdad. Miden tan sólo 7,5 centímetros, pero deleitan a niños y adultos de todo el mundo. Si lo vemos desde el prisma empresarial y marketinero el muñequito, el famoso click con el que tantas horas hemos compartido de pequeños (Y no tan pequeños) es una autentica revolución y digno de estudio.
Desgraciadamente en las últimas horas ha fallecido Hans Beck, inventor de los afamados ‘clicks’ de Playmobil. Nacido en Turingia en 1929, Beck comenzó a trabajar en la compañía Geobra Brandstätter en 1958. Su afición al aeromodelismo y a las maquetas fue determinante en su contrato, pese a que su única formación era de carpintero. En 1971 obtuvo el cargo de jefe de desarrollo de la empresa y el cometido de diseñar una nueva serie de juguetes para niños pequeños. El dueño, Horst Brandstätter, le pidió coches de plástico en los que pudieran sentarse figuras sencillas de forma humana. Uno de los principales criterios, en medio de la crisis del petróleo de los setenta, era el ahorro de materia prima.
Beck necesitó tres años para concluir el proyecto, pero el resultado superó con largueza el encargo original. En la feria del juguete de Núremberg, cercana a la sede de Geobra Brandstätter, presentó Beck su invento: figuras de plástico de 7,5 centímetros, el tamaño que Beck consideraba idóneo para que un niño pudiera esconder una con su mano. Exhibieron la serie del salvaje Oeste, la de construcción y la de caballeros medievales.
El éxito no fue del todo inmediato. Distribuidores y jugueterías eran al principio renuentes a incluir a los clicks en su oferta. Parecían demasiado caras y poco actuales. A los niños, sin embargo, les gustaron desde el primer día. En pocos años, la demanda llegó a superar las capacidades de producción de la empresa.
Durante los 35 años de historia de Playmobil, el diseño básico de las figuras apenas ha sufrido más alteraciones que las manos móviles y la introducción de figuras femeninas en 1976, de niños (5,5 centímetros) y de bebés en 1981. Sin embargo, Beck añadió a las originales diversas series, empezando por la de los piratas en 1978. El gran barco pirata de Playmobil, con cañones, tesoro y tripulación mixta de blancos y negros, era el juguete favorito de Beck entre los que él desarrolló y el de muchos niños que a principios de los 80 vieron frustrados sus sueños cuando se agotaron durante muchas navidades y los reyes magos no pudieron entregarselo (Servidor fue uno de ellos).
Actualmente la empresa lleva vendidos unos 2.200 millones de muñecos y otros objetos reslacionados, y exporta sus jueguetes a 70 países. Tiene unos 3.000 empleados y factura 452 millones de euros….todo gracias a la invención de Hans Beck un visionario que ha conseguido divertir con el concepto de un muñequito a muchas generaciones, un hombre que por su trabajo deberá de ser honrado siempre…