Viendo los cambios y la velocidad de las redes que teje la propia internet, no es extraño llegar a una reunión y que el cliente exija a la agencia o a su departamento de comunicación y marketing una campaña viral que posicione la marca en lo más alto y sea de lo que habla todo el mundo en los corrillos.
Pero, ¿qué es una campaña viral y cómo se consigue? Esa es la respuesta que todos querríamos saber para hacerlas casi en serie. Pero no es sencillo.
Hablemos de impacto, para considerar que una campaña ha sido viral, lo primero que hay que conseguir es una gran repercusión en redes sociales y en los principales portales de internet que se hacen eco de este tipo de contenidos.
Obviamente, no todas las campañas que se pongan en marcha van a conseguir calar en los internautas como para ser compartidas de forma masiva y visualizadas por millones de usuarios, pero la clave en muchos casos está en arriesgar.
Compañías que no apuestan por la innovación y por arriesgar en el mensaje, se quedarán en su público objetivo sin dar un paso más allá. Y ahí es donde está la primera de las claves, la originalidad, un mensaje directo, que hable el mismo idioma de los espectadores, que les cale a nivel intelectual, en su humor, en el impacto contra algunos de sus valores o incluso que se vuelva irreverente y diga en alto algo que todos piensan, pero que nadie expresa en alto.
Aún así, ¿basta sólo con eso? No. La distribución y la elección de los formatos y dónde se publicarán para que el internauta sea capaz de hacer ruido y compartirlo es también parte de la clave del éxito.
Según los datos que se pudieron ver expuestos en el #gen2015, en nuestro país la tendencia es compartir a través de Facebook y Whatsapp, en este orden, para luego saltar la barrera de los amigos y lanzarse al vacío en Twitter. Y es que España es peculiar, porque tendemos primero a compartir con personas de nuestro entorno para poder abrir el primer debate y, luego, según el resultado, lanzarse al vacío, como se ha dicho antes, a plataformas donde el anonimato de los seguidores es casi un hecho.
Obviamente, cada país tiene su propia forma de compartir contenido. Y ahí va también la reflexión, el por qué son virales muchos vídeos y campañas que centran sus imágenes y contenidos en hechos sociales de gran calado que, por norma general, tocan “la fibra” de la sociedad. La gente en el fondo lo que busca y comparte son temas que les preocupan, que les enfadan, que les indignan y, por qué no, reivindican en muchos casos su propia manera de pensar.
Por tanto, en definitiva, para conseguir un contenido viral, para casi cualquier marca, busca contenido que aporte, y mucho, a la sociedad que se mueve por internet.