La eficacia del email marketing que puedes lograr con el constructor de plantillas de newsletter designmodo se basa en que puedes hacer llegar tu mensaje allí donde sabes con toda seguridad que tu cliente o potencial cliente va a mirar cada día, la bandeja de entrada de su correo.
Pero esa eficacia es relativa, porque, ¿De qué sirve llegar allí si luego el correo no llega siquiera a abrirse?
Lo que realmente marca la diferencia es la tasa de apertura. Una campaña puede ser excelente pero de nada servirá un copy fantástico si tu posible cliente no abre el mensaje para leerlo.
La buena noticia es que la tasa de apertura puede mejorarse sin mucha dificultad simplemente trabajando en mejorar algunos aspectos
Para ayudarte a hacerlo, aquí van 5 estrategias que te permitirán conseguirlo:
Trabaja en la línea de asunto
La línea de asunto es mucho más importante de lo que crees. Escribir un asunto genérico o que no llame la atención resultará en una tasa de apertura mucho menor.
Para lograr que la gente abra y lea tus emails necesitas considerar la línea de asunto como si fuese el titular de un artículo o el eslogan de una campaña publicitaria. Necesitas provocar curiosidad y emoción.
¿No sabes cómo lograrlo? Toma nota de estas ideas:
- Plantea una pregunta: El uso de una pregunta en la línea de asunto es una excelente manera de establecer una conexión más personal con las personas que ven tus correos electrónicos.
- Da una orden: A veces vale la pena ser más directo con tu audiencia como una forma de hacer que actúen.
- Lanza un señuelo: La gente es curiosa por naturaleza, así que un señuelo es una buena forma de hacer que la gente abra tus correos
- Crea una lista: Presentar una lista sobre un tema que es del interés de la persona hará que ésta quiera leer el contenido de tu correo. No en balde le estás facilitando una información que de otro modo tendría que buscar por sí mismo.
- Anuncia algo :Si el objetivo de tu correo electrónico es anunciar algo nuevo y este anuncio es de su interés, la curiosidad será suficiente para que el receptor quiera comprobar el contenido de tu email.
Presta atención al nombre que utilizas
Una de las primeras cosas que va a mirar quien recibe el correo es el remitente. Equivocarte a la hora de elegir el nombre que figura como tal puede ser definitivo.
La gente no suele abrir los correos de gente que no conoce, de manera que asegúrate de que en el nombre del correo figura alguien que es familiar.
Si trabajas para una empresa, puede ser mucho más efectivo incluir el nombre de esta que el tuyo propio, si tu negocio eres tú mismo, es decir, si ofreces productos o servicios a través de tu marca personal, utilizar tu nombre es la mejor opción.
Descubre cuál es el mejor momento para enviar tus correos (y hazlo de forma consistente en esa franja)
Aunque creas saber mucho acerca de las personas que son potenciales clientes de tus productos, hay algo que desconoces la mayoría de veces: su agenda personal
Dado que no puedes saber a qué hora se ponen delante del ordenador a consultar su correo, lo más inteligente es probar, probar y probar.
Segmenta tu lista en 2 o 3 grupos, y envía el mismo correo a cada uno de ellos a diferentes horas del día. Comprobando la tasa de apertura podrás hacerte una idea de en qué momento es más eficiente el envío.
Evidentemente esta información no es válida si lo haces una sola vez, así que repite el proceso durante algunas semanas hasta que la estadística te lo confirme.
A partir de que hayas comprobado que una franja horaria obtiene mejor tasa de apertura de forma consistente, envía la totalidad de tus emails en dicha franja.
Conoce a tu público
Una de las primeras cosas que necesitas saber para poder ofrecer a tus clientes lo que demandan es cómo son estos.
Y aunque tengas un perfil muy definido de tu buyer persona, ¿Cuánto sabes realmente de quienes están en tu lista de correo?
¿Sabes qué temas les interesan? ¿Sabes la razón que los llevó a suscribirse a tu lista? ¿Entiendes sus inquietudes?
Cuanto más completa y detallada es la información que tienes sobre tu público, más fácil resulta enviarles información que les resulte valiosa.
¿Como lograrlo? Aquí van algunas sugerencias:
- Envíales una encuesta: a ser posible breve, con pocas preguntas pero relevantes
- Consulta los informes: Los clics van a indicarte qué temas interesan y cuáles no.
- Obtén información por vía directa: El correo y las redes sociales son una valiosa fuente de información. Analiza sobre qué preguntan tus clientes o qué temas les generan más interés a través de tus interacciones con ellos.
Revisa el proceso de registro
Para que los miembros de tu lista abran tus correos, es necesario que sus expectativas estén a la altura de lo que ofreces. De lo contrario, no pasará mucho tiempo hasta que dejen de hacerlo.
Por lo tanto, asegúrate de que en el proceso de registro queda claro cual es el valor de darse de alta en tu lista , con qué frecuencia vas a ponerte en contacto con ellos y qué tipo de contenidos vas a enviarles.
Con esto conseguirás que sus expectativas no se vean defraudadas, y tendrás una lista con gente comprometida y deseosa de revisar la información que les proporcionas. Imagen cortesía de https://freephotos.cc/.