La parte tecnológica de las compañías está, actualmente, en plena ebullición. La necesidad de la digitalización a pasos agigantados que ha demandado en todos los procesos empresariales 2020 ha pillado a muchos desprevenidos y han tenido que ponerse en marcha casi a la carrera para dar cobertura, servicio y capacidad a todos sus stakeholders.
El software sobre el que se trabaje es clave para que no quede ninguna operación colgada, pero también para dar soporte y permitir trabajar a toda la compañía en distintos entornos ya que el teletrabajo ha sido también uno de los grandes retos de los últimos meses.