Desde unos años a esta parte, las nuevas tecnologías de la información y la comunicación han desembarcado de forma masiva en el sector de la automoción. De esta manera, la conectividad, los sistema multimedia integrados o las funcionalidades relacionadas con una conducción cada vez más autónoma y menos dependiente de las reacciones y decisiones humanas se han convertido en habituales en la mayoría de nuevos modelos de las marcas punteras del sector.