Un growth hacker es un perfil profesional altamente especializado en el ámbito del marketing digital y el crecimiento empresarial, orientado a la obtención de resultados rápidos y medibles con recursos limitados. Para desempeñar su rol de manera eficaz, este profesional debe contar con una combinación única de características y competencias muy específicas, que incluyen tanto habilidades técnicas como estratégicas. Entre ellas, destacan:
- Creatividad e innovación para identificar soluciones no convencionales y estrategias disruptivas que impulsen el crecimiento.
- Capacidad analítica para interpretar grandes volúmenes de datos, identificar patrones y optimizar campañas o procesos en función de resultados.
- Conocimientos técnicos, incluyendo experiencia en programación básica, automatización de tareas, herramientas de análisis como Google Analytics, y plataformas publicitarias.
- Mentalidad de experimentación para diseñar, implementar y medir pruebas constantes (A/B testing, experimentos con audiencias, etc.), aprendiendo de cada iteración.
- Enfoque en el usuario, desarrollando estrategias centradas en ofrecer valor y mejorar la experiencia del cliente a lo largo de todo el embudo de conversión.
- Flexibilidad y adaptabilidad para responder rápidamente a los cambios del mercado y a las nuevas oportunidades tecnológicas.
El growth hacker trabaja a menudo en la intersección entre marketing, producto y tecnología, lo que lo convierte en un agente clave para acelerar el crecimiento sostenible de una empresa, especialmente en startups o negocios en etapas de expansión.
¿Qué es un growth hacker?
La expresión growth hacking apareció por primera vez en 2009 como un neologismo creado por Hacker News. Sin embargo, su concepto se originó mucho antes, en las empresas de software de Silicon Valley, donde era frecuente ver a ingenieros de software a los que se les asignaba el título de hacker, en lugar de un puesto en el área de sistemas de información. En su rol, estos hackers se encargaban de investigar y proponer formas de hacer que el software de la empresa funcionara mejor y se usara más. El concepto evolucionó con el tiempo hasta incluir a otras personas y áreas de trabajo (ej. marketers, diseñadores), y dio paso a lo que hoy se conoce como growth hacking.
¿Qué busca un growth hacker?
Los growth hackers persiguen una estrategia de crecimiento digital centrada en las necesidades del usuario, y su principal objetivo es hacer crecer la base de usuarios de una empresa, a través de la búsqueda continua de nuevas oportunidades.
Creación y desarrollo de estrategias de crecimiento
La principal actividad de un growth hacker es idear y desarrollar estrategias de crecimiento para una empresa, en particular para su producto o servicio. Para ello, analiza la audiencia y el contexto competitivo para definir hipótesis de crecimiento, probar diferentes métodos, analizar resultados y refinar la estrategia.
Esta labor se lleva a cabo normalmente dentro de un equipo de crecimiento, aunque en algunos casos se realiza como una actividad independiente dentro del área de marketing. En el pasado, este profesional solía trabajar directamente con el fundador de una empresa (que solía tener también el rol de CEO), ya que a menudo se necesitaba tener una visión y mentalidad amplia para poder definir e implementar estrategias de crecimiento efectivas.
Funciones y actividades principales del growth hacking
Las funciones y actividades de un growth hacker varían en función del contexto y los objetivos de la empresa, pero se pueden agrupar en seis áreas principales:
- Creación de productos o servicios, diseñando y desarrollando nuevas funcionalidades o características para potenciar el crecimiento y ofrecer un mejor valor a los usuarios.
- Investigación y análisis, explorando el mercado, realizando análisis cuantitativos y cualitativos, y obteniendo y analizando datos a través de herramientas como Google Analytics.
- Planificación y ejecución de experimentos, definiendo hipótesis y diseñando y probando experimentos a través de una metodología de trabajo ágil (ej. scrum o Lean Startup).
- Gestión de la relación con el cliente (CRM), definiendo e implementando procesos, herramientas y estrategias para gestionar la relación con los clientes de manera efectiva a lo largo de todo su ciclo de vida, desde la captación hasta la fidelización.
- Creación de estrategias de marketing y publicidad digital, incluyendo el diseño y la implementación de campañas de display y paid media, gestión de redes sociales y creación de contenidos.
En las organizaciones más grandes, el growth hacking suele llevarse a cabo como un equipo independiente dentro del área de marketing digital, o como una función especializada dentro del equipo de gestión de la relación con el cliente.