La cadena hotelera Meliá, que estrenó este viernes en la Bolsa de Madrid su nueva marca corporativa que sustituye a Sol Meliá, cuenta con un ambicioso plan de expansión internacional para el cual ya tiene firmada la apertura de 32 nuevos establecimientos en los próximos dos años, según adelantó el vicepresidente y consejero delegado de la compañía, Gabriel Escarrer.
La compañía ha presentado un plan estratégico que se desarrollará entre 2012 y 2014 cuyas prioridades serán la expansión en los mercados emergentes, especialmente, en Latinoamérica (Brasil, México y Caribe) y en la región Asia-Pacífico, tanto en China como en el sudeste asiático.
El ritmo de aperturas será de un establecimiento cada dos o tres semanas, el 91% de los mismos se abrirá fuera de España y el 87% de los hoteles serán de marcas ‘premium’ o segmento medio. Se sigue priorizando las fórmulas de baja inversión, bajo contratos de gestión, ya que «aunque lo peor ha pasado, debemos ser conservadores», explicó el ejecutivo.
El objetivo de Meliá es situarse «entre los diez primeros grupos turísticos del mundo» y seguir potenciando sus marcas a escala internacional.
Este crecimiento se cimentará en parte gracias a alianzas como las que ya mantienen con la gestora estadounidense Wyndham y la hotelera china Jin Jiang, basada en sólidos acuerdos comerciales como por ejemplo, intercambios de clientela y colaboración en materia de programas de fidelización, aunque Meliá no vislumbra dar acceso a otros grupos en su accionariado, como lo ha hecho su rival NH con la cadena china HNA.
No obstante, Meliá seguirá apostando por el mercado español, y puso como ejemplo la creación de 350 nuevos empleos en el país a pesar de que el mercado nacional «ha sufrido mucho la crisis». No obstante, sería «absurdo» no apostar por el tercer país del mundo que más turistas recibe, que supone entre el 43% y el 44% del Ebitda del grupo.
Escarrer señaló que Meliá tiene garantizados todos sus compromisos financieros para los próximos 18 meses y no descartó que en el futuro se pueda hacer venta de activos. Recordó que menos del 20% de sus inmuebles en propiedad cuenta con hipotecas y que sus inmuebles tienen una media de 22 años de antigüedad.
LA NUEVA MARCA, UN CAMBIO «CUALITATIVO».
Escarrer, ha presentado hoy la nueva marca corporativa en el Palacio de la Bolsa de Madrid, protagonizando el toque de campana de inicio de la sesión bursátil, en el día que cotiza la nueva Meliá Hotels International bajo su nuevo ‘ticker’ MEL.
El responsable agradeció a los inversores la confianza demostrada en el grupo, cuyos títulos se revalorizaron en el parqué un 38,5% en 2009, un 18% en 2010 y un 25% en lo que lleva de 2011. De sus diez inversores institucionales más representativos nueve llevan más de dos años en su capital y cinco han ampliado su participación, destacó.
Escarrer recalcó que el cambio de marca supone «un salto cualitativo» que la cadena ha querido dar tras salir de la peor crisis del sector turístico en más de 50 años.
De entre las siete marcas que posee el grupo hotelero, se ha escogido a Meliá porque representa el 63% del beneficio bruto de explotación (Ebitda) del grupo y por su gran reconocimiento a escala mundial, en especial en los países hispanohablantes.
«La renovación de la marca corporativa dará el impulso definitivo a la nueva etapa que comienza para nosotros, contribuyendo a desarrollar nuestros planes de expansión y a lograr un mayor reconocimiento internacional», destacó en rueda de prensa el director de Marketing de la hotelera, Luis del Olmo.