El fin de las distracciones llega también al marketing

 El Blog de Germán PiñeiroPocos podían presagiar que el fin de la moda audiovisual podría estar tan cerca. Cada vez son más las campañas y al contenido vía podcast.

Y buena cuenta de ello está dando una app a la que cada vez se suscriben más miembros de las altas esferas.

Clubhouse está dejando claro que es el momento de volver al origen de la comunicación e información y eso, al fin y al cabo, acabará pronto pasando factura al marketing tal como lo conocemos a día de hoy.

¿Por qué? Porque lo que se cuece entre los exclusivos miembros de la App acaba cayendo en cascada al resto progresivamente.

El agotamiento del tiempo en las pantallas, la falta de impacto que se consigue hoy en día cuando una persona es capaz de visualizar miles de anuncios tan solo en una red social o navegando de forma habitual por la web o incluso los cambios de algoritmos son solo algunas de las claves que van a llevar a que, en cuestión de uno o dos años, el marketing comience de nuevo a mutar incluyendo otros componentes distintos a los actuales.

No se trata de echarse las manos a la cabeza, sino de, nunca mejor dicho, escuchar. Basta echar un vistazo a las cifras para entender que la diferencia entre oír y escuchar empieza a cambiar en el hábito: más del 47% de los españoles escuchan podcast.

Pero, ¿qué es un podcast y cómo será el detonante de la próxima revolución del marketing?

Un podcast viene a parecerse a la radio de toda la vida, puede estar encendido, se escucha y no es necesario prestar más atención visual. Se está viendo también no solo Clubhouse, sino en el rédito que va consiguiendo otra que ahora está más en auge que nunca: twitch.

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Ésta última ha conseguido la atención de cada vez más creadores de opinión que han pasado de Youtube a ésta última, confirmando la teoría de que, cada vez más, se monetizará contenido de calidad, capaz de interesar de verdad a un público y que se mostrará desnudo, sin audiovisual que lo perturbe o enturbie.

“Son cada vez más quienes acaban agotados de necesitar prestar atención a cualquier comunicación delante de una pantalla. Se va a volver progresivamente al filtro de calidad, a la charla por expertos como si de una masterclass se tratara, a ese tipo de marketing que de verdad llega y que hace de una marca algo de valor. Se va a volver al acompañamiento, no al impacto. Es cuestión de tiempo”.