¿Cuántas horas pasamos delante del ordenador al cabo del día? Muchos pensarán que demasiadas, pero lo cierto es que las marcas lo saben y tratan de sacar el mejor partido de su presencia online.
Las nuevas herramientas de marketing digital han ayudado mucho a la segmentación del público objetivo al que se dirigen los mensajes. Tanto que prácticamente se hace ya comunicación a la carta, human to human, olvidándonos de mensajes tan generales que dejaban fuera la personalización de servicios y productos o porqué no del juego online comenzando por el poker, el bingo o la ruleta.
El paso natural, después de la automatización de casi todos los procesos, fue el volver al contacto directo. Que tras un teléfono aparezca una persona, que tras una red social se preste asistencia directa de tú a tú.
Volver a gestionar la comunicación dirigiéndola directamente a los sentimientos ha sido un acierto en publicidad y eslóganes, pero hay tendencias que también han llegado para quedarse y que tiene una repercusión y viralidad sin precedentes. Se trata de la gamificación.
Más allá de que sea un recurso para las empresas y el incentivar la colaboración de los departamentos y de los estamentos de la propia corporación, es una forma también de incluir al público y a los receptores de los mensajes en las dinámicas activas. Si hay algo que llama la atención en redes es, en muchos casos, cuando una empresa se lanza a “jugar” con su audiencia.
Crear esa comunidad que esté dispuesta a jugar con la marca y también a aportar ideas es vital para estar siempre en constante cambio, algo que hoy se requiere más que nunca.
Ser capaces de generar un flujo informativo con la audiencia de un producto o servicio no solo ha ayudado a la creación de nuevos matices en los desarrollos de producto sino que sirva para testar las reacciones de los que acabarán siendo sus usuarios.
Algo parecido ocurrió con las páginas de juegos online. Un sector que parecía que iba a tener complicado su desarrollo en la vertiente digital ha sabido darle la vuelta a los augurios y hoy en día mueve millones de euros o dólares cada año.
La facilidad que ha ofrecido la red de poder acceder a competiciones internacionales de gran calado para los aficionados a ciertos juegos como la ruleta o el poker. El hecho de poder jugar desde la comodidad de la vivienda, teniendo contrincantes también de altura y permitiendo poder hacerlo en cualquier momento en el que se tiene tiempo y conexión, ha beneficiado a que muchos accedan a un mundo en el que antes no existía posibilidad bien porque en su ciudad o barrio no existiera un establecimiento a la altura o bien por no querer ser vistos.
De hecho, ahí es donde está la clave del éxito, gracias a también la visión del marketing aplicada a este tipo de plataformas de juego online. Viendo que la tendencia era el crecimiento desde los primeros años, muchas campañas de publicidad se establecieron en las páginas de juegos online para poder dar visibilidad de cierto espectro de productos y servicios que pudieran interesar a este perfil de internautas.
De hecho, hablar también de videojuegos es hacerlo de un sector que no ha frenado en ningún momento su crecimiento y más desde que la red permitió competir en la distancia con usuarios de todo el mundo y poner a prueba la destreza de jugadores que incluso se han convertido en profesionales que pueden vivir de ello.
Solo hay que echar un vistazo a los calendarios de citas a lo largo y ancho del mundo en el que se reúnen los mejores jugadores para poner a prueba su destreza e incluso sorprender con sus trucos y calidad de juego. No son pocos los desarrolladores de este tipo de producto los que han echado un vistazo a ese tipo de perfiles para posteriormente reclutarlos como testers o incluso como miembros de una plantilla que de ideas y soluciones a nuevas ediciones en desarrollo.
¿Cifras? Solo el año pasado se movieron en este sector cerca de cinco billones de dólares y la previsión es que este 2017 se incremente en torno al 15% más.
Desde luego, no es para dejar de echar un vistazo a uno de los sectores que más dinero mueven en el mundo digital y el entorno online. Basta pensar en la globalización de un producto que atrae a usuarios independientemente de su cultura, religión o incluso procedencia.
Es un filón en el que el marketing tiene cabida y donde hay que seguir desarrollando estrategias que unifiquen no solo este tipo de producto sino marcas que pudieran, de manera original, relacionarse con el proceso de juego.
Pero si hablamos de estrategias de marketing concreto para el juego online, podríamos partir por reuniones para testar el producto antes siquiera de lanzarlo. A través de influencers que se hicieran eco del mismo, se puede crear un precedente y una generación de expectativa que puede hacer que muchos esperen al lanzamiento para hacerse con él.
Si a esto se le suman las posibilidades multimedia del propio producto, se podría dar con una campaña que atrajera por ejemplo a diseñadores y amantes de los mundos paralelos en los que se desarrollan los propios juegos. Y esta es otra de las claves, los entornos y el diseño de casi realidad aumentada en los que ahora se desarrollan las partidas, que unifican a un tipo de público heterogéneo que no solo es fan del juego sino de todo lo que además le envuelve.
Basta echar un vistazo a las consolas antiguas para ver cómo, de un mando estático, se ha pasado a utilizar cualquier dispositivo de los denominados smart para jugar una partida en un casino, en una calle de Bagdad, en el fondo del océano o cazando Pokemon en cualquier calle del planeta.
Un sector que está en pleno desarrollo, sin lugar a dudas, y que marcará también las tendencias con un tipo de público más exigente cada vez que busca no solo la experiencia sino también un entorno en el que el marketing aún tiene cosas por desarrollar para ellos.