Desde el pasado 2019, cuando se publicó en el BOE, en España es obligatorio que las empresas dispongan de un registro del horario en el que sus trabajadores desempeñan su jornada laboral, independientemente de su turno. De hecho, deben custodiar dicho registro durante 4 años y dejar reflejado el número de horas extra que cada trabajador haya desempeñado.
Ante esto, prácticamente todas las empresas han optado por incorporar un software para control de horarios de empleados para agilizar el trámite, más ahora encima con el teletrabajo, que ha cambiado la forma de estructura empresarial.
Es uno de los recursos más cómodos no solo por la posibilidad de que dicho registro se haga en remoto desde cualquier dispositivo conectado a la red sino porque asegura cumplir con la legislación, evitando multas por fallos formales, y controla también de forma efectiva el tiempo que requiere, en según qué formato corporativo, cada proyecto, optimizando al máximo el tiempo de trabajo y permitiendo que la toma de decisiones sea realizada en base a datos y no estudios.
La propuesta de Bizneo, por ejemplo, se basa en el control de horas trabajadas con un registro disponible a través de web, app móvil o incluso acceso biométrico. Pero el punto clave está en las políticas personalizables que sirven para el registro de la jornada para teletrabajo o incluso para empresas con horarios flexibles.
La facilidad de supervisión, la sincronización de otros softwares con turnos, vacaciones o ausencias, o los informes de registro que sirven no solo para cumplir la ley sino para ser capaces de optimizar las jornadas al máximo para mejorar los resultados no solo empresariales sino facilitar la conciliación a los trabajadores.
¿Cuáles son las principales ventajas para la empresa?
El primero, poder desentenderse de la gestión de este tipo de requisito legal permitiendo que sea un software diseñado para tal efecto el que sirva de base para el registro, atendiendo a la normativa, pero también como forma de sacar información relevante de optimización de tiempos, jornadas y equipos para poder mejorar la planificación laboral interna.
En segundo lugar, el hecho de saber que en todo momento funcionará, evitando problemas a muchos niveles si dejara de ser así. El hecho de poder facilitar a sus trabajadores una herramienta que permita fichar en remoto agiliza al máximo los nuevos escenarios laborales que ha traído consigo la pandemia.
Finalmente, la planificación de las plantillas en turnos, horarios, vacaciones o incluso suplencias en caso de necesidad. El hecho de que desde Recursos Humanos puedan analizar los flujos de personal y horario garantiza que se buscará la mejor planificación de trabajadores.
Si a las obligaciones legales de registrar los horarios laborales en las empresas le unimos la extensión generalizada del teletrabajo con la llegada del Covid-19 hacen que los sistemas de control horario en remoto sean la mejor solución a esta nueva necesidad de obligado cumplimiento por todas las empresas.