Sin duda, el adsl es un gasto fijo en prácticamente todos los hogares y empresas. Actualmente, pese a que cada vez se usa menos el teléfono fijo, lo cierto es que en muchos casos es necesario para poder hacer uso de Internet y de ahí que aún se siga manteniendo en un lugar aunque sea simbólico. Como un adorno en muchos casos, como un objeto que casi se esconde…seamos realistas, el móvil, con todas sus aplicaciones y conectividad ha dejado este teléfono casi para museo incluso en muchas empresas.
Dar de alta una línea WIFI es ya casi tan común como dar de alta la luz o el agua al llegar a cualquier oficina. Según se hace la mudanza o se ocupan las nuevas instalaciones, es uno de los primeros contratos que se tramitan. La fiebre de la conexión es tal que cada vez son más los puntos gratuitos que encontramos en hoteles, calles, establecimientos o incluso bares. ¿Cuántos alargaron el café por seguir aprovechando la conexión del local?
Lo cierto es que España es uno de los países europeos que más cara tiene la conexión. Sólo Chipre superaría los precios que pagan los españoles por este servicio, que sitúa la media en unos 38 euros.
En el resto de la UE, según muestran los últimos informes de la propia Comisión Europea, los precios pueden llegar a ser casi un 400% más baratos (es el caso, por ejemplo, de Lituania). Una de las principales quejas ante esta desigualdad es la falta de unificación de mercado que existe en los países miembros, donde las compañías tienen libertad para poner sus propios precios y competir (a través de sus publicidades) por conseguir una mayor cuota de mercado. Eso sí, con permanencia.
Comparadores de adsl y telefonía
¿Se puede hacer algo para abaratar este coste? En realidad sí. Mientras que los españoles siguen invirtiendo casi un 2.5% de sus sueldos en la conexión adsl, algo puede hacerse para conseguir los precios más económicos.
Como en otros sectores, se puede recurrir a comparadores como Comparaiso, donde semanalmente actualizan la amplia oferta de las compañías. Buscando y uniendo necesidades con promociones de las muchas compañías que ofrecen el servicio de conexión en nuestro país. De esta manera, es cierto que algo se puede ahorrar el usuario medio de las conexiones.
Aunque lo cierto es que pocas veces los usuarios utilizan la banda contratada, podemos ver cómo poco a poco las principales empresas de Internet ven cómo los españoles han dejado de ser fieles a la compañía que, hasta ahora, tenía más contratos. Eso ha hecho que comience una cruzada por incluir más servicios, mejor velocidad y menor permanencia para conseguir mejorar sus cifras de negocio.
Y es aquí donde deberíamos apoyarnos todos. Al igual que en el caso de los seguros de coches buscamos la mejor cobertura, pero también al mejor precio, en el caso del adsl deberíamos hacer lo mismo y comparar constantemente las nuevas ofertas que promocionan las compañías para beneficiarnos.
A vueltas con la permanencia…
La permanencia suele ser uno de los grandes problemas para poder dar el salto e ir cambiando según convenga al usuario.
Hay una única opción: poder darse de baja, salvando la permanencia, por incumplimiento de contrato.
¿Qué incluiría este caso? Un cambio de tarifa, el hecho de que añadan, de forma unilateral, servicios adicionales a tu contrato, una factura donde aparezcan llamadas o descargas no hechas por ti, o incluso que la velocidad o las condiciones de lo que contrataras no lleguen a la calidad que se asumía. No es sencillo, es cierto, pero sorprendería las veces en las que esto ha servido para no tener que esperar los meses necesarios para no ser penalizados.
Pinceladas legales
Ten en cuenta que, con la nueva jurisprudencia que va sentando bases, las penalizaciones en caso de darse de baja durante el periodo de permanencia no deberían ser totales, sino prorrateadas por tantos meses como sea real el incumplimiento. Es decir, si te das de baja a falta de cinco meses de cumplimiento, sólo deberías hacerte cargo de la penalización proporcional a ellos, no de la total.
Finalmente, compara antes de contratar
Antes de darte de alta, piensa bien cuáles serán tus necesidades reales, compara cuáles serán las mejores ofertas para lo que buscas, descubre cuáles son las coberturas y velocidades reales que llegan a tu zona y, sólo así, saldrás beneficiado. Ya que España paga uno de los precios más altos, al menos que cubra realmente su servicio.