Durante los últimos años, la mayor rivalidad en el mundo de las criptomonedas ha sido entre el Bitcoin y el Etherum, también conocido como Eth.
A pesar de que muchos crean que ambas criptomonedas son enteramente similares, lo cierto es que el Eth cuenta con dos diferencias primordiales en comparación con el Bitcoin. Estas son las más importantes.
La identidad de su creador no es un misterio
La razón por la cual esta es una de sus diferencias más resaltantes es porque, al ser esta criptomoneda la mayor competencia del Bitcoin, cualquier detalle en el que no se le parezca resulta significativo.
Sucede que una las características más llamativas del Bitcoin es que sus orígenes representan un auténtico misterio, ya que nadie sabe quién es su creador. Afortunadamente, existe una mayor transparencia en el caso del Eth, ya que la identidad de la persona quien lo creó es de conocimiento público.
La persona detrás de esta criptomoneda es el desarrollador e ingeniero especializado en monedas virtuales Vitalik Buterin, quien en el año 2013 impulsó este proyecto. Buterin pensaba que ante el auge del Bitcoin, era necesaria una lengua para crear aplicaciones dentro de dicha criptomoneda, pero al no poder obtener el suficiente apoyo para semejante proyecto, propuso la creación de otra moneda virtual que representase una especie de competencia.
Su idea con el tema de la rivalidad era que lejos de canibalizarse una con otra, ambas criptomonedas se verían beneficiadas ya que inevitablemente habría un alza de los precios tanto en el Bitcoin como en el Eth.
Buterin anuncia oficalmente esta criptomoneda un año más tarde, y contó con Anthony Di Iorio, Mihai Alisie y Charles Hoskinson dentro del equipo principal de Eth.
Según comentaría Buterin meses más tarde, esta criptomoneda fue financiada a través de una especie de ICO, donde las personas solo tenían la oportunidad de participar a través de Bitcoins, con una relación de una de estas monedas virtuales a cambio de dos mil Eths.
Mayor facilidad en la minería
Aunque parezca mentira, actualmente existe una seria propuesta por parte del equipo de desarrolladores de esta criptomoneda para volver su red en una especie de híbrido entre el consenso “proof-of-stake” y el consenso “proof-of work.”
Lo interesante de esta situación es que el Eth utiliza actualmente este último consenso para poder emitir nuevas fichas a la red, emisión conocido como minería, la cual puede realizarse con computadoras potentes y tarjetas gráficas, a diferencia de lo que ocurre con el Bitcoin.
Por supuesto, esta es una de las mayores ventajas que las Eths tienen sobre el Bitcoin, tomando en cuenta que una de las mayores quejas de los usuarios a nivel mundial sobre esta última criptomoneda es su hermetismo. En el sentido de que no cualquier persona puede tener acceso a su minería, razón por la cual hoy en día esta se realiza con máquinas especializadas en esta operación o en enormes granjas de Bitcoins.
Lo que resulta más frustrante de este método es el hecho de que las maquinas necesarias en ambas operaciones consumen una cantidad anormal de energía, por lo que en aquellos países en donde su uso es ilegal, es muy fácil ser detectado por las autoridades.
El algoritmo de minería para Ethereum es conocido popularmente como Ethas, el cual fue diseñado para desincentivar el uso de equipos especializados ASIC en la minería de Ethereum, permitiendo de esta manera que cualquier persona pueda minar en esta criptomoneda, en lugar de las grandes compañías o solo aquellas personas que tengan el suficiente dinero como comprar una máquina.